Hojeé este libro por primera vez a los quince o dieciséis años. Luego le perdí el rastro. Siempre lo busqué, pero tardé tres décadas en encontrarlo. Estaba en el fondo de reserva de la biblioteca de San Sebastián, traducido al español. No me decepcionó. Bien al contrario, quedé hechizado con este hombre. En el libro relata un viaje a la India, entre 1936 y 1938, desde Ceilán hasta las fuentes del Ganges, en el Himalaya. Al poco de llegar decide despojarse de su personalidad occidental, de sus ropas y de su dinero. Se trata de un viaje espiritual y ascético. Por el camino permanece una temporada en la comuna de Ghandi, que le impuso su otro nombre “Shantidas”. Lanza del Vasto, filósofo, peregrino, poeta, escritor y activista de la no violencia fundó en Francia la Comunidad del Arca. En la edición francesa, en su lengua original, descubrí también la gran calidad literaria de su escritura. Lo que intuí en la adolescencia resultó cierto: este es uno de esos libros de los que no se sale inmune.
Lanza del Vasto, Peregrinación a las fuentes, ed. Seix Barral, 1997.